El 19 de enero escribí la entrada "Ya es hora de ponerse a trabajar." en la que explicaba cuales parecían ser las políticas que Rajoy iba a aplicar para paliar la triple grave crisis (económica, social y fiscal) a la que España se enfrenta.
Pues bien, 10 meses después de aquello y con el 20% de la legislatura cumplida, no se podía haber hecho peor. No sólo no se han solucionado ninguno de esos problemas (muchos no lo esperábamos en tan poco tiempo) sino que encima se han agravado.
Vamos a ir por partes:
En primer lugar la crisis económica. De esta no voy a extenderme mucho ya que estoy cansado de escribir sobre el asunto y simplemente me gustaría señalar que las desastrosas reformas del sector financiero y la actitud de total sumisión del poder público a la banca, está llevando a la ruina a un país que sobrevive gracias a un turismo que huye de los países del norte de África.
En segundo lugar está la crisis fiscal. Tampoco me voy a extender mucho pero no salgo de mi asombro de la total inoperancia de los poderes públicos, tanto españoles como europeos, para salvar una crisis de deuda que hace ya tiempo debía de estar solventada y si bien el bono se mantiene, llevamos semanas vendiendo nuestra deuda un 1% más cara que una Irlanda que tan mal ejemplo era y a la que tanta tierra de por medio ponían nuestros políticos y sin embargo, al parecer, su país es más solvente que el nuestro ya que según los mercados su deuda es más barata. Para solventar esta crisis no se le ocurre otra cosa al señor Montoro que subir impuesto para recaudar más. Este es otro ejemplo de por qué hay personas que nunca deberían ocupar una cartera ministerial.
En tercer lugar y la peor de las tres crisis, nos encontramos con la crisis social. En 10 meses no se ha hecho absolutamente nada para parar la sangría de paro que tenemos. El problema al que nos enfrentamos es al empobrecimiento tan rápido y atroz al que está sometida la sociedad y que afecta ya al 30% de los trabajadores que viven por debajo del umbral de la pobreza. Según el informe que publicara a principio de años la fundación FOESSA, hay 11,5 millones de personas en riesgo de pobreza o exclusión social, muy lejos del 1,5 millones que hablaba Elena Valenciano (otro ejemplo más de lo alejada que está la clase política de la realidad) y de la que muy avergonzada debería de estar por ser ella partícipe de esta barbarie.
Esta mañana deayunábamos con la noticia de que más de 1 millón de personas han abandonado España desde el 2011 y que según el ministerio será de otro millón de aquí a 2020 (yo creo que esta cifra será mayor) a lo que mi pregunta es ¿como piensan los políticos mantener este sistema sin fuerza trabajadora?, la respuesta es clara, NO SE PUEDE. Tenemos una población envejecida y que gracias a la buena calidad de vida en España, cada vez más longeva, pero si se calcula que actualmente hay 2 trabajadores para sostener a un pensionista cuando se necesitan 3, las tasa de natalidad es de 1 hijo por familia y cada día se van más trabajadores a cotizar a otros países, me gustaría saber cómo piensan los políticos dar solución a esta grave situación de un futuro muy próximo.
Ante estos problemas reales, las discusiones que tienen nuestros político es si hay que adoctrinar a los catalanes en la españolidad, o las convocatorias inútiles e ilegales de referéndums independentistas y soplapolleces varias que tan poco importan a aquellos que tienen que ir diariamente a la caridad para saciar su hambre y la de sus hijos.
Señores políticos, la situación se va a poner muy fea para ustedes, da igual de qué partido sean, todos están siendo cómplices de este sistema corrupto, están desoyendo a la sociedad y están dando la espalda a sus votantes y a los ciudadanos. No les auguro un buen futuro porque como ya hemos visto en situaciones anteriores, no van a hacer nada pero esta ocasión es distinta, los ciudadanos ya no les creemos.
